De padeleros y perroflautas.
Quería hacer unas reflexiones, haciendo un poco de abogado del diablo con el tema este del 15M, el 19J, democracia real ya, Sol, etc…
Yo soy el primero en estar de acuerdo con el movimiento, me parece muy positivo lo que está pasando y creo que puede tener un gran futuro a medio-largo plazo. Que quedase claro.
Una de las cosas en las que he estado pensando, habiendo ido a Sol varias veces, participando en las asambleas de mi barrio y en el 19J, etc… es en el número. El número de personas que se implican con el movimiento. Tanto a las manifestaciones como a las asambleas.
El 19J por ejemplo. Me he metido en la web de los que hacen el recuento en las manifestaciones, en esta en concreto, además de en otras conocidas. Se llama Lynce. (http://www.lynce.es/es/index.php) Parece bastante convincente y te indica el método que siguen para contabilizar personas. Afirman que hubo una asistencia de 40.000 personas aprox. El país hablaba de 125.000, y en el caso que más he visto 300.000. Esto es aplicable a cualquier cosa, Sol, 15M, etc… en Madrid somos 7.000.000 de personas. Hasta que punto podemos erigirnos en “voz del pueblo” si no somos más que 300.000. Alguien dirá, -claro, pero es que hay mucha gente que no podía ir-. Cierto. Pongamos que un domingo por la mañana, que nadie trabaja, hay gente que puede estar enferma, de viaje, en compromisos ineludibles, trabajando incluso, lo que sea. Sumemos todos esos. ¿Serían 2 millones quizá? Miremos alrededor, de forma sincera…Pensad en los comentarios que oímos, en Telemadrid e Intereconomía, Lozanitos, Rouco,…que mucha gente se cree a pies juntillas. Yo tengo muchos Amigos que no piensan como yo. Seguro que vosotros también.
Igual no somos tantos como creemos. Igual a mucha gente le entra sarpullido al oír hablar de asambleas, participación, democracia real,…-¡¡suena a comunista!!- También creo que entre todos los que estamos nos podemos poner de acuerdo en varios(o muchos) puntos básicos, pero no en todo lo que se reclama. Somos un grupo muy heterogéneo.
Otro punto en el que estoy dudando seriamente es en la “dirección” del cambio. Yo siempre he abogado por actuar localmente y pensar globalmente. Pero también creo que los dirigentes tienen una responsabilidad extra que no tienen el resto de ciudadanos, aunque solo sea porque es su trabajo. Para eso los elegimos. Este link de un mexicano creo que es digno de ver y estoy totalmente de acuerdo. Creo que da igual que el cambio sea de arriba abajo, o de abajo a arriba, de derecha a izquierda o de dentro hacia fuera. Lo importante es que suceda el cambio. Merece muchísimo la pena. http://www.youtube.com/user/leonz28
El que esté libre de pecado que tire la primera piedra.
Eso sí, es cierto que lo único que está en nuestra mano es lo que nosotros mismos hacemos. Lo que haga Zapatero, Camps, o quien sea no está en nuestra mano. Quizá si vamos cambiando nosotros, nuestra gente, poco a poco de abajo a arriba, desde lo que está en tu mano…puede que un día, la gente haga lo que Tiene que hacer. Todos. Pero eso va a llevar mucho tiempo.
Otro de mis miedos es acabar como mantequilla untada en demasiado pan. Si nos diluimos y de cada movimiento sacamos 20 barrios y en cada barrio 20 comisiones…todo queda un poco “minimalizado”. Es cierto que tiene aspecto positivos, muchos. Pero es un miedo compartido de mucha gente, que puede ser provocado por la prisa. ¿No estamos haciendo un trabajo a largo plazo y necesitamos lo más inmediato?¿No puede que caigamos en la desilusión, el acomodo, al no ver cambios importantes a corto plazo?
Por último echo de menos y creo que sería muy bueno para el movimiento hacer una llamada a todos los que NO están. Estaría genial ver un punky al lado de un pepero pidiendo decencia; política, social, económica y mundial.
Yo creo cada vez más, que esto no va de derechas y de izquierdas, no va de pijos y perroflautas, no va de rojos y azules, no va de fachas. Va de ser decente, ser profesional, ser honorable, de no mentir-manipular, va de tener valores. No de decir que los tienes, de tenerlos. Va de ser capaz de pensar en el bien común antes que en el propio, va de no estafar, de pensar que si queremos sacar nuestro país, nuestro barrio, nuestro mundo adelante, lo tenemos que hacer NOSOTROS. No el vecino, no los políticos, no “los demás primero” o “los demás también”. Tú se consecuente con lo que promulgas, con lo que quieres de los demás. Haz lo que Debes hacer.
